Domingo 5 de abril, a las 10 h... dentro de las actividades de esta senda del poeta virtual hoy vamos a ver cómo hacer la mochila para irnos a la senda.
CUADERNO DE BITACORA I. ¿QUÉ LLEVAR EN LA MOCHILA?
Hoy es jueves, y está noche ya duermo en un pequeño hostal de la Ciudad de Orihuela. Mañana empieza la Senda del Poeta que me llevará 3 días caminando desde Orihuela a Alicante, guiada por los pasos del poeta. Esta noche será la última que dormiré sobre una cama. Mañana en Albatera dormiremos en el, frio suelo del Polideportivo Municipal, y el sábado por la Noche la Universidad Miguel Hernández nos cederá a los senderista un espacio en el Edificio Els Arenals, que tampoco se parece a un mullido colchón.
Todo el trayecto andando lo podré realizar con mi pequeña mochila de trekking de unos 10 litros, ligera pero bien armada, que tantas veces me ha acompañado por los caminos, donde no he de olvidar meter un pequeño bidón de agua de 2 litros. Dentro de esta mochila que me acompañará por los caminos he de meter también algo de fruta o barritas energéticas y crema solar.
También llevaré mi sombrero panamá, un poco grande pero con un ala ancha que me protegerá del sol. La mochila de Viaje más grande, de unos 35 litros, me han dicho que me la pueden transportar durante el día desde el inicio de la jornada hasta el lugar donde dormimos en una pequeña camioneta que se adelanta a los senderistas trasladando sus mochilas de equipaje. Aún sabiendo que no la he de cargar durante la ruta, la he preparado lo suficientemente ligera y bien dotada para que no me falte de nada pero que sea fácil de portar. Es una mochila de 35 litros, no una maleta ni un carrito. Que vamos de senderismo no de vacaciones a la costa!!!
Si creo que lo tengo todo, no se me ha olvidado nada. Tengo un saco de dormir, muy pero que muy ligero que he adaptado a la mochila. Me servirá para una temperatura de unos 15 grados, pero por si hace mucho frío también llevo una toalla de micro fibra que me hace las funciones de tolla y de manta.
Yo tengo una amiga que hizo la ruta con un poncho andino de lana de alpaca!! Le sirvió de manta, de cojín y de refugio! Hace mucho tiempo de eso!! Ahora hay materiales más ligeros que nos ayudan. Igual pero son menos impresionantes. También llevo una bolsa de aseo, con un pequeño jabón que me sirve para el cuerpo y el
cabello, así como mi cepillo de dientes de viaje que siempre me acompaña. La toalla de micro fibra ligera y pequeña pero eficaz me servirá para asearme tanto en le Polideportivo como en la Universidad. Mi bolsa de aseo es como una pequeña mochila que puedo transportar porque en Elche me han dicho que hay que coger un autobús para llegar a las duchas. Es un poco incomodo pero también me han dicho que en la Universidad hay podólogos y masajistas preparados para atender a los senderistas. Que lujo!!!
Bueno voy a descansar ya, pero por si acaso haré mentalmente un repaso de todo lo que me llevo, no vaya a ser que mañana tenga que ir corriendo a la Farmacia a por tiritas para las Ampollas.
MOCHILA DE VIAJE, DE UNOS 35/40 LITROS una mochila cómoda, con tirantes ergonómicos y cinturón para repartir el peso ente la espalda y la cintura. En su interior encontramos una división que me permitirá separar la ropa y los utensilios de aseo. Con cintas para colocar el saco de dormir o la Esterilla y varios departamentos donde guardan objetos pequeños. Toda la ropa que necesito ha de ser preferiblemente deportiva y muy ligera que se seque pronto por si nos llueve o sudamos en exceso. No hay muchas fiestas que nos inviten a mudarnos, pero un fular largo y unos pendientes no pesan mucho y nos dan un toque de glamur, para las galas poéticas.
Y creo que no se me olvida nada, bueno si, VIENTO DEL PUEBLO. Este pequeño libro de mano me acompaña siempre que hago la Senda del Poeta. Me arropa en la noche y me da alas durante el día.
Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
La Senda del Poeta se celebra año tras año, en el fin de semana más próximo a la muerte del Poeta Miguel Hernández, el 28 de marzo de 1942.
Este año, 2020, se iba a celebrar los días 27, 28 y 29 de marzo, pero los trágicos momentos que vivimos debidos a la pandemia provocada por el COVID-19, han hecho que sea aplazada a una posible celebración el mes de octubre.
Pero esta situación nos permitirá agudizar el ingenio y puesto que no podemos pisar la Senda por los caminos que año tras año hemos pisado, la chafaremos virtualmente, navegando por las redes sociales y la web, acercando a todos los participantes, futuros y pasados, la sensación de estar viviéndola cómo si estuviéramos allí.
Queremos invitar a vivir esta senda diferente desde YA.