El civismo es la virtud, el valor y la ética individual y colectiva que hacen posible la habitabilidad, la convivencia y una ciudad más amable. Se traduce en las pautas de comportamiento que nos permiten vivir en paz y libertad, respetando a los otros, nuestro pueblo y el entorno natural.
El civismo comporta generosidad, implica anteponer el bien común y ceder en algunas ocasiones para un mayor bienestar colectivo.